El valle de Aburrá ajustará una semana con pico y placa extendido por la calidad del aire. Esto, tras el anuncio del Área Metropolitana (AMVA) de extender la medida restrictiva -que comenzó el 28 de febrero- hasta el sábado 7 de marzo.
El Sistema de Alertas Tempranas (Siata) dio a conocer que durante la mañana de este miércoles 4 de marzo «se han presentado condiciones altamente desfavorables para la dispersión vertical de contaminantes, la alta cobertura de nubes continúa dificultado el ingreso de radiación a superficie».
Lo anterior hace que la acumulación de contaminantes se haya reflejado especialmente en las estaciones de Barbosa, Aranjuez y tráfico centro.
Carlos David Hoyos, director del Siata, si bien resaltó que los pronósticos han sido «acertados y asertivos para prevenir que las estaciones que lleguen a rojo», se mantienen estaciones con altos índices, por lo que no descartó que algunas lleguen a este color.
«Esta ha sido la vez que más veces se han tomado medidas de manera consecutiva, lo que demuestra que estamos siendo responsables. Con estas medidas se ha reducido en 30 por ciento la contaminación», explicó el directivoRespaldó los resultados de las medidas, indicando que en 2016 el Aburrá registró picos por encima de 110 microgramos por metro cúbico de material contaminante, mientras que año ninguna ha superado los 50.
Esta ha sido la vez que más veces se han tomado medidas de manera consecutiva, lo que demuestra que estamos siendo responsables
Por su parte, Juan David Palacio, director del AMVA, explicó que el protocolo para tomar estas medidas (El POECA) no está malo, sino que se trata de una herramienta en construcción que necesita actualizarse, por lo que no descartó que para octubre de este año o para la contingencia del 2021, se presenten cambios como un pico y placa de 24 horas.
Sobre la queja ciudadana de tomar decisiones por pocos días y no durante toda la temporada, el AMVA indicó que es imposible tener un pronóstico para tres semanas, que podrían ser más complejas en cuanto a índices de calidad del aire.
«La solución al problema del aire en el valle de Aburrá no se logrará de un día para otro, se tomará mínimo en 10 años. Pero de nuevo hacemos un llamado en cómo nos movilizamos, porque esa incomodidad de las personas habla de la adicción que hay al vehículo particular y ese comportamiento es lo que se busca cambiar», puntualizó el director del Siata
Esa incomodidad de las personas habla de la adicción que hay al vehículo particular
Y es que según cálculos del área metropolitana, el pico y placa restrictivo a seis dígitos saca de circulación al 60 por ciento del 1’550.000 que en promedio transitan por Medellín y su área metropolitana, es decir, unos 930.000 vehículos.
En el caso solo de Medellín, la secretaría de Movilidad indicó que entre 5 y 10 de la mañana se registra en promedio una disminución del 12 por ciento (30.068 vehículos menos) en la intensidad vehicular con respecto a un día habitual, en vías principales.
MEDELLÍN